- Juicio a las naciones (4,1-21)
Anuncio del juicio contra las naciones
- 1
- Precisamente en aquel tiempo,
cuando yo cambie la suerte de Judá y de Jerusalén,
- 2
- reuniré a todas las naciones
y las haré bajar al valle de Josafat. Allí pleitearé contra ellas en favor de Israel, mi pueblo y mi heredad, pues lo dispersaron entre los paganos, mientras se repartían mi tierra;
- 3
- echaron mi pueblo a suertes,
cambiaron a muchachos por rameras, vendieron a muchachas por vino bebiendo sin control.
- 4
- ¿Qué pretenden de mí ustedes,
Tiro, Sidón y comarcas todas de Filistea? ¿Quieren vengarse de mí? Si contra mí planean venganza, haré que recaiga repentinamente la venganza sobre su cabeza,
- 5
- pues me robaron la plata y el oro,
llevaron a sus templos mis mejores tesoros,
- 6
- vendieron a los griegos
los habitantes de Judá y de Jerusalén, alejándolos así de su tierra.
- 7
- Pero yo los sacaré de allí,
del país al que los vendieron, y haré que ustedes tengan que pagar con la misma moneda:
- 8
- venderé sus hijos e hijas
a los habitantes de Judá, y ellos los venderán a los sabeos, a una nación lejana. Así lo ha dispuesto el Señor.
Convocatoria a la batalla
- 9
- Pregonen esto a las naciones,
declaren la guerra santa, convoquen a los valientes, que acudan todos los guerreros.
- 10
- Forjen espadas de sus arados
y lanzas de sus podaderas. Diga el débil: ¡Soy un valiente!
- 11
- Pueblos todos de alrededor,
vengan juntos y congréguense allí. ¡Pon, Señor, en marcha a tus valientes!
- 12
- Que se preparen y suban los pueblos,
que acudan al valle de Josafat, pues allí me he de sentar a juzgar a todos los pueblos vecinos.
- 13
- Empuñen la hoz,
pues la mies está madura; vengan, pisen la uva, pues está lleno el lagar; rebosan ya las cubas, es inmensa su maldad.
- 14
- Grandes multitudes están presentes
en el valle del Veredicto, porque se acerca el día del Señor en el valle del Veredicto.
- 15
- El sol y la luna se oscurecerán,
las estrellas perderán su brillo.
- 16
- Desde Sión el Señor rugirá,
desde Jerusalén alzará su voz, el cielo y la tierra temblarán; el Señor será el refugio de su pueblo, la fortaleza de los hijos de Israel.
- 17
- Reconocerán así que yo,
el Señor su Dios, habito en Sión, mi santo monte. Jerusalén será lugar santo, y nunca más la atravesarán los extranjeros.
Restauración de Judá
- 18
- Aquel día los montes destilarán mosto,
las colinas manarán leche, correrá el agua por todos los arroyos de Judá, y del Templo del Señor brotará una fuente que regará el valle de Sitín.
- 19
- Egipto será un lugar desolado
y Edom una estepa desértica, porque violentaron a las gentes de Judá, y derramaron sangre inocente en su tierra.
- 20
- Pero Judá será habitada para siempre,
y Jerusalén por innumerables generaciones.
- 21
- Vengaré su sangre,
no la dejaré impune. Y el Señor habitará en Sión.
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