- Felicidad verdadera
- 1
- Feliz el hombre
que no sigue el consejo de los malvados, ni va por el camino de los pecadores, ni hace causa común con los que se burlan de Dios,
- 2
- sino que pone su amor en la ley del Señor
y en ella medita noche y día.
- 3
- Ese hombre es como un árbol
plantado a la orilla de un río, que da su fruto a su tiempo y jamás se marchitan sus hojas. ¡Todo lo que hace, le sale bien!
- 4
- Con los malvados no pasa lo mismo,
pues son como paja que se lleva el viento.
- 5
- Por eso los malvados caerán bajo el juicio de Dios
y no tendrán parte en la comunidad de los justos.
- 6
- El Señor cuida el camino de los justos,
pero el camino de los malos lleva al desastre.
|