- Dios y los ídolos
- 1
- Escucha, pueblo de Israel, la palabra del Señor.
- 2
- Dice así:
«No aprendan ustedes la conducta de las naciones, ni se aterroricen ante las señales del cielo, aunque las naciones les tengan miedo.
- 3
- Las costumbres de los pueblos
no tienen valor alguno. Cortan un tronco en el bosque, y un artífice lo labra con un cincel.
- 4
- Lo adornan con oro y plata,
y lo afirman con clavos y martillo para que no se tambalee.
- 5
- »Sus ídolos no pueden hablar;
¡parecen espantapájaros en un campo sembrado de melones! Tienen que ser transportados, porque no pueden caminar. No les tengan miedo, que ningún mal pueden hacerles, pero tampoco ningún bien.»
- 6
- ¡No hay nadie como tú, Señor!
¡Grande eres tú, y grande y poderoso es tu *nombre!
- 7
- ¿Quién no te temerá, Rey de las naciones?
¡Es lo que te corresponde! Entre todos los sabios de las naciones, y entre todos los reinos, no hay nadie como tú.
- 8
- Todos son *necios e insensatos,
educados por inútiles ídolos de palo.
- 9
- De Tarsis se trae plata laminada,
y de Ufaz se importa oro. Los ídolos, vestidos de púrpura y carmesí, son obra de artífices y orfebres; ¡todos ellos son obra de artesanos!
- 10
- Pero el Señor es el Dios verdadero,
el Dios viviente, el Rey eterno. Cuando se enoja, tiembla la tierra; las naciones no pueden soportar su ira.
- 11
- «Así les dirás: “Los dioses que no hicieron los cielos ni la tierra, desaparecerán de la tierra y de debajo del cielo.” »
- 12
- Dios hizo la tierra con su poder,
afirmó el mundo con su sabiduría, ¡extendió los cielos con su inteligencia!
- 13
- Cuando él deja oír su voz,
rugen las aguas en los cielos; hace que vengan las nubes desde los confines de la tierra. Entre relámpagos hace llover, y saca de sus depósitos al viento.
- 14
- La *humanidad es necia e ignorante;
todo orfebre se avergüenza de sus ídolos. Sus imágenes son un engaño, y no hay en ellas aliento de vida.
- 15
- No valen nada, son obras ridículas;
cuando llegue el día de su castigo, serán destruidas.
- 16
- La heredad de Jacob no es como ellos,
porque él es quien hace todas las cosas; su nombre es el Señor *Todopoderoso, e Israel es la tribu de su herencia.
Destrucción inminente
- 17
- Recoge del suelo tus cosas,
tú que te encuentras sitiado.
- 18
- Porque así dice el Señor:
«Esta vez arrojaré a los habitantes del país como si los lanzara con una honda. Los pondré en aprietos y dejaré que los capturen.»
- 19
- ¡Ay de mí, que estoy quebrantado!
¡Mi herida es incurable! Pero es mi enfermedad, y me toca soportarla.
- 20
- Devastada está mi carpa,
y rotas todas mis cuerdas. Mis hijos me han abandonado; han dejado de existir. Ya no hay nadie que arme mi carpa, y que levante mis toldos.
- 21
- Los *pastores se han vuelto *necios,
no buscan al Señor; por eso no han prosperado, y su rebaño anda disperso.
- 22
- ¡Escuchen! ¡Llega un mensaje!
Un gran estruendo viene de un país del norte, que convertirá las ciudades de Judá en guarida de chacales, en un montón de ruinas.
Oración de Jeremías
- 23
- Señor, yo sé que el *hombre
no es dueño de su destino, que no le es dado al caminante dirigir sus propios pasos.
- 24
- Corrígeme, Señor, pero con *justicia,
y no según tu ira, pues me destruirías.
- 25
- Derrama tu furor
sobre las naciones que no te reconocen, y sobre las familias que no invocan tu *nombre. Porque se han devorado a Jacob; se lo han tragado por completo, y han asolado su morada.
|