- El pecado, la fe y el deber
- 1
- Luego dijo Jesús a sus discípulos:
—Los *tropiezos son inevitables, pero ¡ay de aquel que los ocasiona!
- 2
- Más le valdría ser arrojado al mar con una piedra de molino atada al cuello, que servir de tropiezo a uno solo de estos pequeños.
- 3
- Así que, ¡cuídense!
»Si tu hermano peca, repréndelo; y si se *arrepiente, perdónalo.
- 4
- Aun si peca contra ti siete veces en un día, y siete veces regresa a decirte “Me arrepiento”, perdónalo.
- 5
- Entonces los apóstoles le dijeron al Señor:
—¡Aumenta nuestra fe!
- 6
- —Si ustedes tuvieran una fe tan pequeña como un grano de mostaza —les respondió el Señor—, podrían decirle a este árbol: “Desarráigate y plántate en el mar”, y les obedecería.
- 7
- »Supongamos que uno de ustedes tiene un *siervo que ha estado arando el campo o cuidando las ovejas.
Cuando el siervo regresa del campo, ¿acaso se le dice: “Ven en seguida a sentarte a la mesa”?
- 8
- ¿No se le diría más bien: “Prepárame la comida y cámbiate de ropa para atenderme mientras yo ceno;
después tú podrás cenar”?
- 9
- ¿Acaso se le darían las gracias al siervo por haber hecho lo que se le mandó?
- 10
- Así también ustedes, cuando hayan hecho todo lo que se les ha mandado, deben decir: “Somos siervos inútiles;
no hemos hecho más que cumplir con nuestro deber.”
Jesús sana a diez leprosos
- 11
- Un día, siguiendo su viaje a Jerusalén, Jesús pasaba por Samaria y Galilea.
- 12
- Cuando estaba por entrar en un pueblo, salieron a su encuentro diez hombres enfermos de *lepra.
Como se habían quedado a cierta distancia,
- 13
- gritaron:
—¡Jesús, Maestro, ten compasión de nosotros!
- 14
- Al verlos, les dijo:
—Vayan a presentarse a los sacerdotes. Resultó que, mientras iban de camino, quedaron *limpios.
- 15
- Uno de ellos, al verse ya sano, regresó alabando a Dios a grandes voces.
- 16
- Cayó rostro en tierra a los pies de Jesús y le dio las gracias, no obstante que era samaritano.
- 17
- —¿Acaso no quedaron limpios los diez? —preguntó Jesús—.
¿Dónde están los otros nueve?
- 18
- ¿No hubo ninguno que regresara a dar gloria a Dios, excepto este extranjero?
- 19
- Levántate y vete —le dijo al hombre—;
tu fe te ha *sanado.
La venida del reino de Dios
- 20
- Los *fariseos le preguntaron a Jesús cuándo iba a venir el reino de Dios, y él les respondió:
—La venida del reino de Dios no se puede someter a cálculos.
- 21
- No van a decir: “¡Mírenlo acá! ¡Mírenlo allá!” Dense cuenta de que el reino de Dios está entre ustedes.
- 22
- A sus discípulos les dijo:
—Llegará el tiempo en que ustedes anhelarán vivir siquiera uno de los días del Hijo del hombre, pero no podrán.
- 23
- Les dirán: “¡Mírenlo allá! ¡Mírenlo acá!” No vayan;
no los sigan.
- 24
- Porque en su día el Hijo del hombre será como el relámpago que fulgura e ilumina el cielo de uno a otro extremo.
- 25
- Pero antes él tiene que sufrir muchas cosas y ser rechazado por esta generación.
- 26
- »Tal como sucedió en tiempos de Noé, así también será cuando venga el Hijo del hombre.
- 27
- Comían, bebían, y se casaban y daban en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca;
entonces llegó el diluvio y los destruyó a todos.
- 28
- »Lo mismo sucedió en tiempos de Lot: comían y bebían, compraban y vendían, sembraban y edificaban.
- 29
- Pero el día en que Lot salió de Sodoma, llovió del cielo fuego y azufre y acabó con todos.
- 30
- »Así será el día en que se manifieste el Hijo del hombre.
- 31
- En aquel día, el que esté en la azotea y tenga sus cosas dentro de la casa, que no baje a buscarlas.
Así mismo el que esté en el campo, que no regrese por lo que haya dejado atrás.
- 32
- ¡Acuérdense de la esposa de Lot!
- 33
- El que procure conservar su *vida, la perderá;
y el que la pierda, la conservará.
- 34
- Les digo que en aquella noche estarán dos personas en una misma cama: una será llevada y la otra será dejada.
- 35
- Dos mujeres estarán moliendo juntas: una será llevada y la otra será dejada.
- 36
- 37
- —¿Dónde, Señor? —preguntaron.
—Donde esté el cadáver, allí se reunirán los buitres —respondió él.
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