- El hombre desobedece a Dios
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- Entre los animales salvajes que Dios creó, no había otro más astuto que la serpiente.
Un día, la serpiente le dijo a la mujer: —¿Así que Dios les dijo que no comieran de ningún árbol del jardín?
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- La mujer le contestó:
—¡Sí podemos comer de cualquier árbol del jardín!
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- Lo que Dios nos dijo fue: “En medio del jardín hay un árbol, que no deben ni tocarlo.
Tampoco vayan a comer de su fruto, pues si lo hacen morirán”. Pero la serpiente insistió:
- 4
- —Eso es mentira.
No morirán.
- 5
- Dios bien sabe que, cuando ustedes coman del fruto de ese árbol, serán iguales a Dios y podrán conocer el bien y el mal.
- 6
- La mujer se fijó en que el fruto del árbol sí se podía comer, y que sólo de verlo se antojaba y daban ganas de alcanzar sabiduría.
Arrancó entonces uno de los frutos, y comió. Luego le dio a su esposo, que estaba allí con ella, y también él comió.
- 7
- En ese mismo instante se dieron cuenta de lo que habían hecho y de que estaban desnudos.
Entonces tomaron unas hojas de higuera y las cosieron para cubrirse con ellas.
- 8
- Con el viento de la tarde, el hombre y su esposa oyeron que Dios iba y venía por el jardín, así que corrieron a esconderse de él entre los árboles.
- 9
- Pero Dios llamó al hombre y le preguntó:
—¿Dónde estás?
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- Y el hombre le contestó:
—Oí tu voz en el jardín y tuve miedo, pues estoy desnudo. Por eso corrí a esconderme.
- 11
- —¿Y cómo sabes que estás desnudo? —le preguntó Dios—.
¿Acaso comiste del fruto del árbol que te prohibí comer?
- 12
- El hombre respondió:
—La mujer que tú me diste por compañera me dio del fruto del árbol. Por eso me lo comí.
- 13
- Dios se dirigió entonces a la mujer, y le dijo:
—¿Qué es lo que has hecho? Y la mujer le respondió: —La serpiente me tendió una trampa. Por eso comí del fruto.
- 14
- Entonces Dios le dijo a la serpiente:
«Por esto que has hecho, maldita seas, más que todo animal doméstico; ¡más que todo animal salvaje! Mientras tengas vida, te arrastrarás sobre tu vientre y comerás el polvo de la tierra.
- 15
- »Haré que tú y la mujer,
sean enemigas; pondré enemistad entre sus descendientes y los tuyos. Un hijo suyo te aplastará la cabeza, y tú le morderás el talón».
- 16
- A la mujer le dijo:
«Cuando tengas tus hijos, ¡haré que los tengas con muchos dolores! A pesar de todo, desearás tener hijos con tu esposo, y él será quien te domine».
- 17
- Al hombre le dijo:
«Ahora por tu culpa la tierra estará bajo maldición, pues le hiciste caso a tu esposa y comiste del árbol del que te prohibí comer. Por eso, mientras tengas vida, te costará mucho trabajo obtener de la tierra tu alimento.
- 18
- Sólo te dará espinos que te hieran,
y la hierba del campo será tu alimento.
- 19
- »Muy duro tendrás que trabajar
para conseguir tus alimentos. Así será hasta el día en que mueras, y vuelvas al polvo de la tierra, del cual fuiste tomado. Tú no eres más que polvo, ¡y al polvo tendrás que volver!»
- 20
- Entonces el hombre le puso a su esposa el nombre de Eva, porque ella sería la madre de todos los que iban a vivir en la tierra.
- 21
- Luego Dios vistió al hombre y a su esposa con ropas de piel,
- 22
- y dijo:
«Ahora el hombre y la mujer son como uno de nosotros, pues conocen el bien y el mal. Si llegaran a comer algún fruto del árbol de la vida, podrían vivir para siempre».
- 23
- Por eso Dios los expulsó del jardín de Edén, y puso al hombre a cultivar la tierra de donde había sido formado.
- 24
- Después de expulsar al hombre y a la mujer, Dios puso unos querubines al este del Edén, y también puso una espada encendida que giraba hacia todos lados, para impedir que alguien se acercara al árbol de la vida.
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